Una vez más, Fronteras Electrónicas de España se ve en la obligación de salir al paso de los crecientes intentos de criminalización de la Red, tanto desde las fuerzas policiales como por parte de determinados medios de comunicación.
La pasada semana, la detención de un presunto hacker, acusado de acceder ilegalmente al sistema informático del Ministerio del Interior, dio lugar a una cascada de contrainformaciones, al parecer generadas por las propias fuerzas encargadas de la investigación, y que tuvieron su máximo exponente en la información publicada en el diario ABC, acerca de la colaboración del detenido con la banda terrorista ETA, que posteriormente se comprobó nada tenía que ver con la realidad.
No podemos dejar de manifestar nuestra repulsa por determinadas circunstancias
que han rodeado este caso, que ya fue objeto de reproche en un anterior
comunicado de FrEE. No es lógico que se trate a una persona sin
antecedentes penales como si fuese un peligroso criminal, manteniéndolo
una semana sin fianza en un calabozo de dudosas condiciones sanitarias,
cuando el delito que se le imputa comporta una pena máxima de cuatro
años de prisión. Queremos creer que dicha privación
de libertad no tenía como objetivo quebrantar la voluntad del acusado
para obtener del mismo, mediante cansancio y soledad, una declaración
autoinculpatoria. Segun la Ley de Enjuiciamiento Criminal, sólo
se puede privar a un ciudadano de su
derecho constitucional a la libertad cuando se dan las condiciones
previstas, lo que al parecer no ocurre en este caso, como puso de manifiesto
la estimación final del recurso interpuesto por la defensa del procesado.
Por último, debemos solicitar a los medios de comunicación,
y muy especialmente a ABC, que reconsideren su política de constante
criminalización de las informaciones relacionadas con el ciberespacio.
Con ello están haciendo un flaco servicio al desarrollo de la Red
en nuestro país, ya muy retrasado con respecto a los países
de nuestro entorno cultural. Internet es nuestro futuro, y no podemos
seguir viviendo de espaldas a la Red: de nuestra responsabilidad depende
convertirla en un instrumento para el progreso de la Humanidad.